02 octubre 2008

Razones para ser un poco más feliz.

Pensaba que este post sería sobre "mi nuevo cuarto", tema como se percibe nada pretencioso y con el que simplemente quería compartir un trocito de mi pequeño y reedecorado mundo, pero en vista de que la finalización de tal proyecto va para largo y de que bydiox ya me ha dado un tirón de orejas por llevar tanto tiempo sin actualizar el blog (comienzo de clases, nuevos alumnos, etc, etc...), recojo la invitación realizada por Banyú en su blog y me entrego a la tarea de enumerar seis cosas que me hacen feliz y que escribo de forma aleatoria y no por orden de importancia:
  1. Salir de clase con la sensación del deber bien cumplido, de haber conseguido transmitir, emocionar, intrigar, convencer... Sentir la complicidad en la mirada de tus alumnos y su cariño sincero.
  2. Viajar. Las noches de verano y sus madrugadas eternas... pasear en esos momentos sintiendo el calor incipiente y el rocío del amanecer.
  3. El olor a jazmín, a azahar, el sonido del mar y el ronroneo de mi gata por las mañanas depertándome...
  4. Releer pasajes de mis libros favoritos, poemas o escenas de películas y seguir emocionándome.
  5. Saber que pase lo que pase SIEMPRE cuento con mi familia y con mis amigos, que NUNCA me fallan.
  6. E, inevitablemente, como buena romántica sin remedio y visceral convencida, sorprenderme conociendo a alguien que me mueva por dentro, desmontando mi mundo. Verme reflejada en sus ojos. Sentir hasta el delirio. Perder la cabeza y entregarme, simplemente, a vivirlo... aunque luego todo quede en nada. Siempre (o casi siempre) merece la pena y espero no perder esos "brotes de locura".

No creo que exista un estado absoluto y constante de felicidad sino momentos que hacen que todo cobre sentido. Quizá este listado sea una forma de recordarnos por qué merece la pena seguir al pie del cañón...

Estas son mis seis opciones... ¿y las tuyas? Sea las que sean no olvides una, la fundamental: Quiérete y vive.

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7 comentarios:

Banyuken.es dijo...

Gracias, igualmente.

Anónimo dijo...

Coincidimos en las 3 últimas...
Y yo añadiría...

Ayudar a alguien. Me siento feliz ayudando a la gente.

Comenzar un libro nuevo con la expectativa de qué deparará.

Poder reirme aún con cualquier tontería... En sí mismo parece una tontería, pero me sorprendo a veces de lo poco que ríe la gente.

Vanessa Melibea dijo...

@banyuken:

Idem

Iñaki:

Yo también coincido contigo en esas tres opciones, la verdad es que seis son pocas, me hacen felices muchas más cosas y entre ellas están tus elecciones, y añadiría: contagiarme con la risa de mis amigos, como con la tuya corazón. Me encanta que comentes mi blog.
BESOTES

Albert dijo...

La priemra de ellas dice mucho de tu implicación docente y las demás ... ¿Qué decir de las demás?... sin palabras me has dejado. Es evidente que eres una romántica empedernida e incurable. Espero que no cambies nunca.

Un beso :*

Vanessa Melibea dijo...

@Albert:

Qué bonito lo que me dices... Es cierto, soy una romántica sin remedio, lo que tiene sus cosas buenas y cosas malas (tradúzcase: grandes bofetadas de realidad...) pero sí, yo también espero no perder esa "chispa".
Otro besito para ti. :**

Pazuka dijo...

Esto..., decía... ¿te quieres casar conmigo?

Sigue dándole caña a la vida y convierte ciertas cosas en tonterías para, como dice Iñaki, poderte reir de ellas.

Vanessa Melibea dijo...

@Pazuca:

Sí, quiero ^____^ jajaja...
La verdad es que me sorprendo de la capacidad que tenemos, o tengo en este caso, de trivializar y dejar que no duelan las cosas, porque nena, ¿sabes? es que simplemente NO merece la pena.
Y a reírse...